¿Qué es la moda lenta?
¿Cómo han cambiado nuestros hábitos de compra a lo largo de los años?
La forma en que compramos ropa ha cambiado hasta quedar irreconocible. El estadounidense promedio compró 68 prendas nuevas en 2019, en comparación con solo 12 en 1980*. De esos 68 artículos, sólo la mitad se usaron más de 3 veces. Estamos comprando más ropa, a un ritmo más rápido que nunca, y luego la dejamos en nuestros armarios. Este consumo excesivo no es sostenible y está contribuyendo a la crisis climática de nuestro planeta.¿Cómo puede la práctica del slow fashion ayudar al planeta?
El algodón , por ejemplo, es el cultivo no alimentario más grande del mundo, y los métodos agrícolas convencionales utilizan semillas y pesticidas genéticamente modificados, que con el tiempo agotan la nutrición del suelo y reducen la biodiversidad local. Asegurándonos de que nuestras próximas compras se realicen con algodon organico (cultivado sin pesticidas), o un paso más allá, cultivado usando practicas regenerativas (que apoyan la salud del suelo y los agricultores) estamos invirtiendo en métodos que devuelven más de lo que reciben.
Además, al reevaluar nuestra conexión con la ropa, eligiendo remendar o reparar artículos en lugar de tirarlos (donde pueden terminar en vertederos o incineradores), u optar por artículos de segunda mano en lugar de comprar nuevos, podemos ayudar. para reducir la demanda de ropa nueva que se produce.